domingo, 13 de noviembre de 2011

Diálogo post-platónico (segundo capítulo)



Ella no demoró su respuesta a mi sutil planteamiento sobre la celebración del reencuentro con un buen revolcón:
-Esta noche, querido, no puedo acompañarte…caigo rendida, también sola. Somos dos, solos y tontos.

Un caballero como el que suscribe contestaría como lo hice yo:
-Descansa como si la vida te fuera en ello ¡Qué inútil ser dos!

Ella mensajeó su réplica:
-Cierto, hay que ser más simples, ser uno en lugar de dos.

Rematé la faena con un adorno por alto:
-¡Qué cansancio ser dos inútilmente! ¡Que tengas un buen día!

A la tarde siguiente, sin noticias de ella, decidí ensayar con una pregunta formulada en lenguaje propio de la diplomacia vaticana:
-¿Cómo ves la cuestión de un polvo de gala para santificar la reanudación de nuestras relaciones personales?

En cosa de segundos, ella escribió lo que sigue:
- Pues claro, eso no lo dudes…

Su respuesta me dejó jodido. Cuando una mujer asevera rotundamente asunto tan inconcreto, mal se presentan las cosas. Mi cerebro, que es más elemental que el mecanismo de un chupete, hubiera preferido algo así como: “Mañana por la tarde, a eso de las siete, me esperas en tu casa con un magnum de Dom Perignon Vintage 2000 Extra Brut, bien enterrado en un balde repleto de hielo picadito.”

5 comentarios:

  1. Sin lugar a dudas o yo fui hombre en mi otra vida o tengo demasiado de masculino...
    Tus respuestas son las que habría dado yo, desde luego nada más lejano a un "no" en varias ocasiones a un buen revolcón, con botella de D.P incluida.
    Me caigo de la risa con lo del mecanismo de un chupete, es que lo humanos somos tan complicados...Con lo fácil que resulta decir, estoy en tu portal en una hora.
    En fin, algunos se lo pierden.
    Espero con ansias el tercer capítulo.
    Un beso.

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  2. Qué forma más curiosa tienes de sugerir un polvo...A las mujeres nos gusta - de vez en cuando-dejaros jodidos.
    Me sigue fascinando tu forma de contar las cosas; más que leerte, te bebo.

    Un beso ( o dos).

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  3. Y sí...a las mujeres hay que entendernos...pero no somos tan complicadas.¿Por qué no le respondiste vos con la propuesta de la respuesta que pensaste para ella? Era más simple que entender el mecanismo de un chupete, que no es tan simple...y si no, decíselo a una mamá cuando el bebé llora y llora y te lo escupe y no lo quiere a pesar de los cantos y los mimos y la teta o la mamadera y vos, muerta de sueño, no sabés qué carajo quiere.Besos, Manuel María...y mucha buena suerte.

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  4. Hola Manuel me bebí tus letras esperando estoy el siguiente capitulo.

    Difícil es que dos seres estén de acuerdo ,en el mismo momento para hacer algo, sea lo que sea. se hacen cosas y se dicen cosas para llevar la contraria y fastidiar al otro.
    Uno dice blanco otro dice negro.
    Otra cosa es lo que piensan realmente para ellos...

    Besos de MA para ti.

    Feliz día.

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Pienso que l@s comentarist@s preferirán que corresponda a su gentileza dejando yo, a mi vez, huella escrita en sus blogs, antes bien que contestar en mi propio cuaderno. ¡A mandar!