domingo, 11 de diciembre de 2022

Los domingos y las parejas

 


Hace tiempo los matrimonios de la burguesía acostumbraban todos los domingos, invariablemente, a asistir a misa de doce en su parroquia. La mujer solía comulgar, mientras el hombre se quedaba sentado en su banco, o bien salía a la calle a fumar un cigarrillo. Terminada la misa, la pareja acudía a su bar favorito a tomar un vermut con aceitunas rellena de anchoas.

Después de celebrar en el hogar el almuerzo dominical con los hijos que ya se habían independizado, los varones escuchaban el Carrusel Deportivo en Radio Madrid, al tiempo que las damas charlaban y hacían prendas de punto en el salón de la casa.

Hoy en día las nuevas parejas hacen la compra semanal en el supermercado del barrio y, después de comer una hamburguesa en el Burger,  se van al apartamento a poner en marcha la lavadora, el lavavajillas y demás tareas domesticas. La tarde se dedica, cada uno por su cuenta, a las redes sociales o a preparar el tele-working de la semana entrante.

O tempora, o mores!

1 comentario:

Pienso que l@s comentarist@s preferirán que corresponda a su gentileza dejando yo, a mi vez, huella escrita en sus blogs, antes bien que contestar en mi propio cuaderno. ¡A mandar!